Al consumir drogas, los padres u otros miembros de la familia pueden perjudicar a los niños.
Abandono
- Es posible que quienes tienen problemas de drogas se olviden de cuidar a los niños.
- Quizás no haya nadie para prepararles la comida, ayudarlos a bañarse y vestirse o llevarlos a la escuela.
- Tal vez no haya nadie que les compre ropa o se las lave.
- O que los lleve al médico o los ayude con la tarea.
Condiciones de vida inseguras
- Es posible que el consumo de drogas impida a los padres trabajar y ganar dinero.
- Por lo que podrían gastarse todos los ahorros de la familia.
- Los niños podrían quedarse sin calefacción, comida, electricidad o incluso un lugar para vivir.
Daño físico
- La presencia en la casa de miembros de la familia con problemas de drogas puede no ser segura para los niños.
- Es posible que estas personas no estén lo suficientemente alertas como para proteger a los niños de accidentes o de otros adultos que podrían hacerles daño.
- Es posible que haya muchas peleas y que los niños sufran abandono o abuso.
- También es peligroso para los niños que alguien en la casa venda drogas o cometa otros delitos.
Quizás los niños deban abandonar su hogar
- Si los padres consumen drogas, el Departamento de Servicios para Menores y Familias puede llevarse a los niños del hogar para brindarles seguridad y cuidados. Es posible que tengan que vivir en otra casa con un familiar o que tengan que ir a un hogar de tránsito.
Problemas futuros
- Cuando los niños crecen rodeados de estos problemas es más probable que también tengan problemas de drogas en el futuro.
Visita la página Cómo ayudar a los niños y adolescentes a vivir sin drogas de la serie de lectura fácil Easy-to-read Drug Facts para aprender a evitar que los niños consuman drogas.